XIV

La política es el arte de proponer fines imposibles, de imposible cumplimiento o fines sin fin. El coeficiente de viscosidad es un ingrediente esencial del flujo guardián que ralentiza e imposibilita la realización del proyecto en su conjunto, apenas concretado en una u otra obra testimonial, en elementos aislados, que entran a formar parte de las estadísticas y que, incluso así, son fallidos en esencia y remodelables en un futuro más o menos próximo. Sin necesidad de elecubrar demasiado, es factible observar en este carácter pegajoso, entorpecedor, de encenegamiento y enpantanamiento, de promoción de la familiaridad y la proximidad inducida, un rasgo de reminiscencias edípicas, viscoso y adhesivo. Porque el arte de la política también es el arte de hacer la vida imposible, de eliminar las distancias, de crear problemas sin solución, de dificultar lo que en el fondo es fácil y complicar lo que no tiene complicación; arte de la basura y del deshecho porque es un hacer que se deshace nada más realizarse, posible sin ninguna posibilidad, que recicla sus desperdicios y que vive de la basura que genera y de rebuscar en su propia basura. Toda posibilidad aparece como remota, inalcanzable y todos los sueños se desploman antes de alzar el vuelo, pesados y pegados a una tierra alquitranada, negra, llena de plumas adheridas. Ícaro nunca debería haber volado.